Como se puede observar, la insulina desempeña un papel fundamental en la diabetes. Esta hormona es necesaria para convertir los azúcares, el almidón y otros alimentos en la energía que necesitan nuestras células para funcionar. Cuando esta conversión deja de producirse, las células no obtienen la energía que precisan y el azúcar se acumula en la sangre, lo cual resulta dañino para nuestra salud. Si bien este daño no se produce de manera inmediata, existe el riesgo de que se produzcan complicaciones a largo plazo que tienden a desarrollarse después de un período de alrededor de entre 10 y 20 años.
El daño a largo plazo provocado por tener un alto nivel de azúcar en sangre durante largos períodos de tiempo puede afectar a los ojos - y provocar problemas de visión y ceguera -, a los nervios - insensibilidad en los pies, piernas y brazos -, al corazón - ateriosclerosis y otras patologías afines — y a los riñones.
La conexión entre la diabetes y los riñones
La diabetes es la principal causa de enfermedad renal crónica (ERC) y afecta a millones de personas en todo el mundo. Aproximadamente el 50 % de los pacientes de diálisis de Fresenius Medical Care son diabéticos.
Si vive con enfermedad renal diabética, es extremadamente importante mantener el control y el cuidado tanto de su diabetes como de sus riñones para que pueda estar lo más saludable posible.
¿Están relacionadas la diabetes y la enfermedad renal?
La enfermedad renal diabética se refiere a una disminución de la función renal que ocurre en algunas personas que tienen diabetes. La diabetes es un factor de riesgo de enfermedad renal. Con el tiempo, los niveles altos de azúcar en la sangre pueden hacer que los pequeños vasos sanguíneos del riñón se estrechen y se obstruyan. Sin suficiente sangre, los riñones se dañan.
La diabetes también puede causar daño en los nervios de su cuerpo. Si los nervios de la vejiga están dañados, es posible que no pueda sentir cuándo está llena. La presión de una vejiga llena puede dañar los riñones. Si la orina permanece en la vejiga durante mucho tiempo, es posible que contraiga una infección del tracto urinario. Esto es causado por bacterias que crecen rápidamente en la orina cuando el nivel de azúcar es alto. En ocasiones, estas infecciones pueden propagarse a los riñones.
Las personas con diabetes también pueden desarrollar presión arterial alta. Esta es otra de las principales causas de ERC. Si le diagnostican una enfermedad renal, es importante saber que puede tomar medidas para controlar la ERC.